jueves, 24 de julio de 2014

sábado, 12 de julio de 2014

LOS MUNDIALES Y MI FÚTBOL

Toda mi vida está envuelta de futbol, no soy capaz de relacionar nada de mi historia sin que este deporte forme parte de él, incluso lo más personal.

Primero he de hacerme entender, uno de mis primeros recuerdos de infancia fue cuando mi padre me acercó (nos acercó) al estadio para ver un partido. Desde ese momento el balón pasó a ser protagonista de la relación entre mis hermanos y mis padres y yo. Esperábamos a que llegara de trabajar, y los cuatro (una chica y tres varones) pedíamos de inmediato ir al parque a jugar. Así fue hasta que mi hermano mayor y yo comenzamos a jugar ya con un equipo, eso sí, la presencia de mi familia no cesó.

Otro recuerdo claro lo relaciono con los mundiales de fútbol, tengo conciencia de ellos desde España 1982, alguien me ha contado que en Argentina 1978, ya dejamos un poco de lado la boda de mi tía Irene (en la cual yo hice de paje), para ver la final (alguien imprudente decidió que fuese el mismo día), y según me cuentan todos estaban mirando el fútbol, más que la boda; pero es un recuerdo que no tengo (solo tenía 6 años).

Sin embargo cada mundial siguiente lo tengo muy presente, primero porque siendo Españoles en Venezuela (un país con poca tradición de dicho deporte en aquella época), nos reuníamos para ver a la selección de la “Furia”. Era una fiesta, tíos, primos, hermanos, etc….todos juntos opinando, riendo, llorando por el fútbol.

Mi madre siempre lo vivió de forma única y especial, cuando jugaba España mi casa era una fiesta, banderas, música, comida, todo para alentar a la selección. Pero nosotros también teníamos nuestros gustos, yo, por ejemplo siempre fui por Argentina, primero porque como todo niño te apuntas por aquel que es campeón y segundo porque Maradona era lo que hoy en día es Messi; entonces sencillo. Yo era de Argentina, de Maradona. Mis hermanos sin embargo se apuntaban más al carro de selecciones de grandes porteros: Alemania, Belgica, etc, pero sobre todo Alemania. Eso sí, todos coincidíamos en aupar a España. Gracias a dios nunca se enfrentó a Argentina, creo que me hubiesen echado de casa.

En España 1982 todos fuimos derrotados, pero no sabíamos lo que nos esperaba en los mundiales siguientes. El destino quiso que celebráramos los 4 goles del Buitre como nunca y que en mi caso particular, viese con un gran entusiasmo la consagración de” El Diego” y la albiceleste. Recuerdo muy bien la final, mis hermanos más por Alemania, y yo por Argentina, creo que mis padres se mantenían en tierra neutral (al menos no mostraban sus preferencias), ese día festejé yo, y mis hermanos tenían un muy buen perder.

Nuevamente el destino caprichoso decidió que en Italia 1990 la final se repitiese: Argentina vs Alemania, y esta vez me tocó perder, y mi familia conoció lo mal perder que tenía: Lloré, insulté, justifiqué. Incluso hoy en día recuerdo lo subjetivo que era: En el 86 con el gol de “la mano de Dios”, justifiqué una y mil veces al árbitro: difícil ver la mano, yo he visto la repetición 10 veces y tengo dudas, el linier no estaba bien colocado, la acción es muy rápida, el segundo gol vale por tres y demás barbaridades. Sin embargo en la final de 1990, cuando el árbitro señaló el penalti exploté: La FIFA es una mafia, el árbitro está comprado, es injusto….. entiendanme era un fanático.

Los años han pasado, y los mundiales también. Yo me he formado como entrenador y ahora voy por el fútbol. Desde 1990 no lloro por un partido de fútbol (miento, lloré cuando al Diego le cortaron las piernas), he emigrado y mis hermanos también. Pero el destino ha querido que la final de 1986 y de 1990 se repita. ¿Una vez más, mis hermanos por Alemania y yo por Argentina?, no lo sé.

Tengo grandes recuerdos de estas finales, me han marcado la vida. Hoy quisiera estar junto a mis padres, hermanos, tíos, primos y revivir estos recuerdos, sin importarme por quien va cada uno, tan solo disfrutar de su compañía y reír, recordar y celebrar los goles (de quien sean).

Me ha marcado tanto la vida que recuerdo que al día siguiente de la final de 1990, día amargo, no había dormido y si llorado, me fui a la universidad. Una chica se me acerca y me comenta: ¿Viste la Final?, respondo: si claro, y ella contesta: menos mal que ganó Alemania….Aunque no lo crean hoy en día es mi Esposa.