HÁBITOS
Aprovecho
esta serie de “clásicos” para retomar el hábito de escribir. La verdad es que
el poco tiempo que tengo es la única excusa que puedo manejar, pero al fin y al
cabo no soy hombre de excusas, así que recupero el hábito y lo empleo como el principal
argumento para hablar de los equipos del clásico.
He
leído en varios foros y noticias los innumerables errores del Barça de Tito y
Roura (aunque en mi opinión ya se mostraban en el último año de Guardiola), que
si necesita un 9, que si los laterales no defienden bien, que si Messi ha
estado por debajo de su nivel, sin embargo y a pesar de estar de acuerdo con
varios de estos argumentos, yo lo relaciono más con la perdida des hábitos. El
Barcelona de los 6 títulos y el de los dos años siguientes, tenía unos
comportamientos adquiridos que le hacían el mejor. Explico: En la fase de
ataque el equipo primero buscaba amplitud máxima con los laterales y extremos,
luego mucha movilidad de sus interiores y una profundidad manifestada por Etoo
y Messi, dentro de estos aspectos el equipo estaba siempre predispuesto para
defender, Los laterales subían igual (sobre todo Alves) y el espacio siempre
estaba bien vigilado, alternaban muy bien el juego corto con el largo y si es
verdad que su juego combinativo era un arma que utilizaban para desorganizar al
contrario, la aparición de jugadores de segunda línea le dotaban del índice de
sorpresa que ayudaban a romper a rivales muy encerrados. En la fase defensiva,
se organizaban en despliegue, permitían el primer pase y a partir de ahí
realizaban una presión física y organizada de mucha intensidad, si les rompían
la primera línea de presión, siempre se reorganizaba el equipo con gran
velocidad, los jugadores desbordados replegaban para ayudar y la línea
defensiva buscaba achicar para hacer el campo corto al rival, se basaban en no
permitir ser desbordados ( en ninguna línea) y no permitir penetraciones por el
pasillo central, pero sobre todo en una gran solidaridad y generosidad
colectiva. Luego están las fases de transiciones, en la ofensiva el equipo al
recuperar manejaba más opciones de contraataques, podía decidir hacer un ataque
combinativo, pero si el rival estaba desorganizado buscaba hacer daño rápido,
buscaba la espalda de los rivales de forma asidua y vertical, en la transición
defensiva el equipo aprovechaba el hecho de que en la fase de ataque organizado
estaban muy cercanos unos a otros para presionar en la zona de perdida, aquí
eran muy fuertes y no permitían las opciones de contraataque del rival y sobre todo
las coberturas y ayudas no dejaban situaciones de 1vs1 en la zona de seguridad
defensiva. Estos en mi opinión eran los hábitos del mejor Barcelona de la
historia.
¿Qué pasa
ahora?, para mi es sencillo, este equipo dejó de realizar estos hábitos en las diferentes
fases del juego, desde el último año de Guardiola hasta ahora van dando
muestras de no ser tan estrictos en cada uno de los momentos de juego. En la
fase de ataque sigue siendo un equipo amplio, pero ahora carece de la movilidad
de antaño, no es un equipo estático, pero si las rotaciones del medio campo son
menos habituales y sobre todo son menos profundos, si Messi va al medio campo
nadie se coloca de centro delantero y sobre todo los laterales están y no
llegan en profundidad y los extremos buscan mucho juego en diagonal y casi no
buscan desbordar por fuera, y si lo hacen en muchas ocasiones no hay
rematadores en el área (Messi está en el medio, el extremo contrario abierto y
los interiores no llegan). En defensa organizada el equipo ya no ejerce la
presión de antaño, su intensidad en escasa y eso hace que no recuperen más
balones en campo contrario, además los jugadores desbordados ya no colaboran
como antes y la línea defensiva se encuentra con la idea de achicar pero esta
vez ante rivales que están cómodos (sin presión) y en situaciones de 1vs1 que
conllevan mucho riesgo. Ya no decir de las transiciones, el equipo ante la
perdida sigue estando junto, pero ya no es tan solidario, son más veces
desbordados y les cuesta regresar, creo que todo parte del hecho de que en el
ataque organizado el equipo no tiene una buena ocupación racional del terreno
de juego y por ello son más vulnerables ante la pérdida del balón. Cuando
recuperan la pelota, primero lo hacen más lejos de la portería adversaria y luego
casi no manejan la opción del contraataque, siempre prefieren el ataque
combinativo con lo cual le dan suficiente tiempo al rival para reorganizarse. Además
debemos añadir el estado anímico que es fundamental, el equipo se ve con menos
fe y algo más desquiciado e impotente ante la adversidad.
¿El Real
Madrid?, pues todo lo contrario, primero está en un estado anímico formidable,
el grupo pelea y se tiene fe, es un equipo agresivo e intenso, y además sigue
mejorando en las diferentes fases del juego. Desde la llegada de Mourinho, el
equipo tiene unas señas de identidad claras en cada fase. En ataque organizado
nunca ha querido ser un equipo con posesiones largas, esto hace que no se
desorganicen en demasía y les permite una buena transición; eso si, no regalan
el balón y sus jugadores tiene criterio para tocarlo, lo que pasa es que son
mucho más verticales y buscan con más celeridad la portería contraria, para
ello Cristiano y Di María suelen ser muy agresivos y atacan y buscan duelos
constantemente, además de buscar tiros de media distancia. En la fase defensiva
el equipo cuando adelanta la presión suele recuperar muchos balones y eso les
ayuda a ir en ruptura rápidamente buscando la mayor aproximación posible sobre
el área rival, eso si, al superarles la primera línea de presión suelen abusar
de la falta táctica, pero son ahora más solidarios. En las transiciones nada
que decir, son los mejores, al robar ya meten miedo con los desmarques de
ruptura y en pocos pases y con pocos elementos suelen finalizar acciones de
forma vertiginosa y ante la perdida han mejorado bastante desde la temporada
pasada hasta ahora, están bien parados y suelen ser muy contundentes en las
acciones defensivas. Sin embargo cuando el equipo ha estado mal en la liga es
por no haber respetado estos principios, que ahora los están ejecutando bien,
pero habrá que ver si es una constante de aquí al final de temporada.
Estas
son para mi las razones de que el Real Madrid le haya dado vuelta a la
tortilla, parece que ahora le cogió la matricula al Barça, ¿Cuánto durará?, le
toca al Barcelona recuperar los hábitos de su escuela, sino el Real Madrid
puede marcar un ciclo de paternidad sobre su máximo rival. Veremos.
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